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“No Pidas Nada”
Cuando hacemos la labor que Dios nos encomendó debemos estar conscientes de que es en obediencia, por amor y compromiso a Él. Muchas veces lo que hacemos para Dios y su Reino nunca será respondido y mucho menos recompensado. Jesús fue el mejor ejemplo de esto. Siendo el hijo de Dios, su tarea fue difícil e incluso fue puesta en tela de juicio.
Evangelizar, llevar las buenas nuevas de salvación, es la práctica de enseñar a los demás la fe de Jesucristo. Esto es una de las misiones más grandes que tenemos como embajadores de Dios aquí en la tierra. Debemos procurar llevar a cabo esta misión sin pereza, dudas o miedos, a pesar de tener el mundo en contra, tal como dice Romanos:
Porque no me avergüenzo del evangelio, porque es poder de Dios para salvación a todo aquel que cree” - Romanos 1:16
Humanamente tendemos a realizar alguna labor, y esperamos recompensa de la misma. En el Reino de Dios es completamente lo contrario. Las acciones realizadas que aportan a la misión dada por Dios, no necesariamente son recompensadas físicamente. Debemos tener presente que nuestro mayor galardón proviene de Dios. Esto es lo que dice la Palabra en Colosenses:
Hagan lo que hagan, trabajen de buena gana, como para el Señor y no como para nadie en este mundo, conscientes de que el Señor los recompensará con la herencia. Ustedes sirven a Cristo el Señor. - Colosenses 3:23-24
Jesús nos enseña en su Palabra que nuestras acciones deben venir acompañadas de buenas intenciones, sin esperar ser recompensados de vuelta, consientes de a quién servimos. (Lucas 14:12-14) Seamos dignos representantes de Cristo, seamos imitadores de Jesús. Realicemos nuestra encomienda y misión, esperando el día de nuestra recompensa en Cristo Jesús. “Hagamos la invitación”.
Estudio:
En Hebreos 11 leémos acerca de los héroes de la fe y todas las cosas que hicieron. Sin embargo, en el versículo 39 se nos dice que no recibieron recompensa física. Si seguimos leyendo, en Hebreos 12:1-3 se nos dan algunos consejos para seguir adelante con nuestra misión.
Estudia ambas porciones y reflexiona:
¿Qué mantenía firme a los héroes de la fe en continuar con su misión?
¿Cuáles son los consejos que nos da Hebreos 12 para seguir adelante?
¿Cómo podemos aplicar estos principios para mantenernos firmes en nuestra misión de evangelizar?
Verdad de la Semana:
"El amor no espera recompensa."
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